viernes, 11 de septiembre de 2009

¿Qué está ocurriendo en el ministerio de Defensa?

Me ha llegado un correo denunciando posibles arbitrariedades al interior del ministerio de Defensa por parte del recién nombrado titular, David Munguía Payés. Si esto realmente está pasando al interior de la Fuerza Armada, creo que la situación podría llegar a niveles críticos en una institución que se ha mostrado apegada TOTALMENTE a lo pactado en los Acuerdos de Paz. Este es el correo recibido:

BITÁCORA DE UN ACOSO INJUSTIFICADO

El Ministro de la Defensa Nacional hacienda gala de su desconocimiento de lo que a meritocracia se refiere y buscando ascender a sus más allegados compañeros de esgrima, destituyó ilegalmente al General Napoleón Agreda del cargo de Presidente y miembro del Tribunal de Ascenso para General, por lo que el militar tuvo que hacer uso de su legitimo derecho concurriendo a la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Corte Suprema de Justicia.
En represalia a esta actuación legitima, dan la orden de traslado al General de 81 años de edad y quien ha sido por años el Jefe de Asesores del Ministro de la Defensa Nacional (por cierto, habiéndose desempeñado la mayor parte del tiempo ad honorem) y lo envían como Asesor de la Escuela de Sub Oficiales y Clases de la Fuerza Armada con sede en La Unión, y como bien lo dijo el general al contestar esta notificación de traslado, me sentiría muy honrado en trabajar con la tropa, pero no es el cargo al que he sido contratado y la Corte de Cuentas puede hacer un reparo al respecto.

Con esa respuesta, posteriormente le avisan que se quede en el Ministerio, pero se le notifica que inicia su proceso de destitución por pérdida de confianza. ¿Cómo es posible que un General Express (como le llamó un medio electrónico nacional) con dudosa actuación durante su tiempo de militar y que es ascendido en un mes con una refrenda dada por él mismo, en autentica violación a la Ley de Ética Gubernamental por valerse de su cargo para beneficiarse personalmente, pueda decir y mucho menos probar, que un General de la talla del General Agreda pudiera siquiera pensar en dañar a la institución que tanto ha defendido durante toda su vida? Procedimiento también ilegal, ya que el Reglamento de Trabajo del Personal Administrativo de la Fuerza Armada es taxativo cuando señala las causales de destitución, no encontrándose la alegada por el Ministro.

Las actuaciones revanchistas de funcionarios como éste son las que hacen que la institución tenga baja la moral y que reine la incertidumbre en estos momentos en que el objetivo debería ser buscar la cohesión nacional para ganar la lucha contra la delincuencia que tanto afecta nuestro país.


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