La elección está definida y es el momento que el candidato ganador comience a dar muestras que intentará reconciliar este país, sin revanchismos, sin traumas. Deberá tender puentes. (Foto de La Jornada de México)
La campaña dio paso a una serie de roses, cuestionamientos y críticas, las cuales esperemos que el candidato ganador las tome como propias del momento político que se vivió.
De parte del candidato perdedor, también deberán de tenderse puentes, saber aceptar la derrota y hacer oposición constructiva, algo que tampoco ha existido pero que el país necesita en estos momento de crisis mundial.
La postguerra ha terminado y El Salvador se encamina a una alternancia la cual esperemos que sirva para que el país termine de limar asperezas, que cambie el rencor y el odio que por años se ha anidado en muchos corazones por la esperanza y la reconciliación.
Felicidades Mauricio Funes, presidente electo.
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