La diferencia entre Arturo y Mauricio, y el rédito que puede sacar Rodrigo

Las muestras de apoyo del FDR hacia la candidatura vicepresidencial de Arturo Zablah con el partido ARENA ya recoge sus primeras víctimas: la disolución del pacto del FDR con el CD.
¿Por qué ocurre esto? Cómo lo había mencionado en el pasado, el CD ha venido de menos a casi nada en las últimas contiendas electorales, y parece estar claro que el FDR (que participará en sus primeras elecciones) no está dispuesto a correr la misma suerte.

No es para menos, porque para el FDR la figura de Zablah es el verbalismo de sus conceptos político-ideológicos.

Recordemos que los efederristas poseen un vínculo de amor-odio con la actual dirigencia ortodoxa efemelenista; mientras ellos procuraban un planteamiento más socialdemócrata, los otros con un planteamiento político revolucionario dogmático. Entender esto ayuda a descifrar el porqué para el FDR sería más factible brindar su apoyo a la figura de Zablah más que a la de Mauricio Funes.

También está el componente del trabajo territorial que ya habían caminado juntos Zablah-FDR.
Recordemos que cuando el FDR intentaba concretar apoyos para la llamada tercera vía y con ello formar una alianza para lanzar la candidatura de Zablah, los efederristas le abrieron todo un abanico de accesos hacia aquellas personas desencantadas con el FMLN y su proyecto político-ortodoxo, y que además no terminaban de cuadrar con la idea de la continuidad de ARENA.

Quiérase o no Arturo Zablah le lleva varios kilómetros de distancia a Mauricio Funes porque él se ha dedicado a realizar trabajo de campo, visitando a las personas en sus colonias, lugares de trabajo, donde el dirigente comunal; mientras que el candidato del FMLN no ha pasado de las reuniones organizadas por grupo de amigos y que prácticamente han sido en hoteles y con algunos sectores, y los mitines que le programan sus correligionarios en el partido.

Este trabajo territorial de Arturo es, precisamente, lo que deberá capitalizar Rodrigo Ávila y lograr que su figura como candidato de ARENA sea “digerida” en aquellos sectores poblacionales que una están indecisos por quien votar y que en todas las encuestas se muestran como los más “apetecibles” y que sin lugar a dudas pueden llegar a definir la próxima elección.

En resumen, Arturo Zablah tiene un pie adelante en el acercamiento y la búsqueda de apoyos en el llamado “voto pensante” que no posee un partido definido y que antes de acudir a las urnas valoran su voto y no lo emiten solo por seguir a un dirigente político sino a un proyecto político. Pero para eso deberá de demostrar que realmente ARENA está dispuesta a abrir las puertas del partido mucho más allá de la candidatura a la vicepresidencia y que el proyecto de la “Alianza por el cambio” no ha quedado en letra muerta. Ese es el reto.

LINK:
- El pleito por las migajas
- Alianza Por El Cambio - Blog de Arturo Zablah
- Las claves para elegir a Arturo